Arthur Cravan, mi boxeador favorito

El cuadrilátero ha tenido sus poetas, gente de contundente lirismo en los puños, como Jack Dempsey, Sugar Ray Leonard y Óscar de la Hoya. Pero sólo era metáfora. Excepto en el caso de Arthur Cravan. Sobrino de Oscar Wilde y revindicador de su memoria, poeta vanguardista admirado por dadaístas y surrealistas, prófugo de los ejércitos de seis países, boxeador profesional, leyenda, Arthur Cravan, en el mundo Fabian Avenarius Lloyd (Lausana, 1887-desaparecido en el golfo de México 32 años después), es uno de esos personajes alucinantes de un siglo XX rico en ellos. Duchamp, Trotski, Picabia, Octavio Paz y Guy Debord han tenido palabras para Cravan, entre cuyas performances avant la lettre, además de las conferencias sobre arte en las que bailaba, se desnudaba o disparaba un Colt 45, se cuenta el mítico combate con el campeón del mundo de los pesos pesados Jack Johnson, en 1916, en la plaza de toros Monumental de Barcelona.


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Entre 1912 y 1915, en París creó la revista crítica literaria Maintenant, de la cual aparte de editor, era el único redactor y vendedor de la misma, tarea que realizaba con un carrito por las calles de la capital francesa. Las criticas en dicha revista eran feroces (fustigando a artistas de la talla de Picasso) y subersivas, llegando incluso a ser juzgado y encarcelado por algunos articulos. forjándose una fama de anti-artista anticipándose algunos pocos años al dadaismo en sus formas y actitud (y 60 años al movimiento Punk).

En 1915, durante la primera guerra mundial, se instaló en Barcelona, organizando un año después un combate (amañado por supuesto, Cravan no pasaba de ser un boxeador mediocre, además se presentó totalmente borracho) con el campeón del mundo de los pesos pesados Jack Johnson (Cravan medía 2 metros y pesaba más de 100 Kilos), combate que se puede entender casi como una performance artística.(1)

Después viajó a Nueva York donde también fue encarcelado por escandalo público (se desnudó durante una conferencia que daba en una acto invitado por Duchamp), conoció a la poetisa Mina Loy, vinculada a los futuristas. Juntos se fueron a vivir a México donde fijaron su residencia. Allí en la costa caribeña, Cravan se aficionó a navegar en barco, y a los 32 años desapareció en el mar, sin que se recuperara nunca su cuerpo, iniciando así la leyenda.

extraído de 

http://www.losdelpisodearriba.com/2008/04/el-boxeador-poeta.html